SANIDAD : VAN A POR ELLA

Ellos no dudan, están desmantelando, ante nuestras narices todo lo que queda del estado de bienestar. Secciones de hospitales enteras (como la unidad de radiología del hospital provincial), pago de medicamentos (copago sanitario), apropiación privada de la educación pública (educación concertada). El método que utilizan se resume en una palabra: axfisia. Están utilizando la axfisia financiera para llevarse por delante todo el estado del bienestar.

¿Realmente somos conscientes de lo que está pasando y de las consecuencias que va a tener en nuestras vidas y en las generaciones futuras? ¿ Es que nos creemos invulnerables? Ahora, cuando estoy escribiendo ésto estoy cómodamente sentado. Cierto que estoy pasando la gripe, pero no es muy fuerte y con ayuda de un analgésico lo estoy sobrellevando bastante bien. Tanto que me cuesta tomar consciencia de las situaciones mucho peores en el futuro. Pero de ahora en adelante mi cuerpo con el paso de los años irá a peor. Será posiblemente un descenso suave. o ¿quizá no?- ¿Quien me dice que soy invulnerable frente al cáncer, al infarto, al ictus? No quiero ni pensar en esta posibilidad, pero está ahí, aunque mi inconsciente procure evitármela a la consciencia. ¿Y qué pasará entonces un día cualquiera de dentro de, pongamos, diez años? Hasta ahora, teníamos (también con sus deficiencias) un sistema que nos ayudaba en estos casos. ¿Qué pasará en el futuro? ¿Tendremos esa seguridad de que el sistema va a responder? Por que no en todos los países ocurre. Nos hacíamos cruces de la sanidad de Estados Unidos y mientras muchos han aplaudido a Obama con su reforma sanitaria (como si se tuvieran que operar de apendicitis  en Oklahoma) aquí comenzó la barra libre a la privatización de la sanidad (aunque muchos me dirán con razón que venía de antes)
Pero en la vida todo termina y yo también algún día moriré. Dejo de lado, por pertenecer a otra área, la cuestión de acerca de con qué recursos sobrellevaré mis últimos años, aunque por lo que sucede en la vanguardista República Federal de Alemania, ahí los viejos tienen que trabajar. Pero me refiero a la cuestión de cuando llegue a no poder cuidar de mi mismo. ¿Qué me pasará entonces? ¿Podré llevar mis últimos días con dignidad? (si es que no me quedo en el camino) .
Miren, yo no he nacido para vivir en la jungla, lo reconozco. Pero por las escasas respuestas que están teniendo estos problemas dudo ya de muchas cosas. En un país sin un sistema de salud público, la gente cuando se ve en problemas de este tipo, tiene que entrar en una jungla para recibir la atención adecuada (ahorraré detalles) o resignarse. Yo puedo pasar este resfriado leve sin ir al médico, pero a otras personas ésto les podría costar la vida.
Por lo tanto seamos prudentes, porque estamos sentados sobre un auténtico barril de polvora. Y pongamos todas nuestras fuerzas (como usuarios o profesionales de la salud) y comencemos a movernos a favor de una sanidad pública, totalmente gratuíta, universal y de calidad.